Mientras que
hacía las valijas, Luz estaba junto a ella algo disgustada, pero feliz tambien
de que ella vaya a descansar)
P: Tranquila
pronto voy a volver, yo… Tengo que volver!
L: No me
dejes mucho tiempo, te quiero mucho para que te vayas tanto tiempo.
P:
Tranquila, van a ser unos meses nada más…
L: MESES?
Con muchas SS?
P:
Tranquila, no sé cuando, pero pronto voy a estar acá, te lo juro. (Le daba un
abrazo cálido, cuando recordando le dice) AHH! Me acorde…
L: Que, que
pasa?
P: Tengo
algo para vos…
L: Para mí,
enserio?
P: Si, si
son…
(Trayendo
una bella caja rosa opaca, limpió el exceso de polvo mientras decía)
P: Estas, me
las regaló la abuela Isa, para cuando cumplí tu edad…
(Abriendo la caja se encontró con un par de
zapatos de baile con estrases)
L: Hay Pau…
Son hermosos. (Tomando uno en sus manos)
P: Si…
¡Quiero regalártelos! (Dijo entregándole la caja)
L: No, no
son tuyos no hace falta que…
P:
(interrumpiendo) Yo quiero que los tengas.
L: Pero…
P: No hay
peros ¿sí?
L: Ok… (Dijo
dejando caer unas lágrimas al ver a los zapatos seminuevos que su abuela le
había regalado a su hermana)
P: No
llores, ella está en nuestros corazones por siempre…
L: La
extraño tanto, ni te imaginas… Y encima la abuela Elena que se fue con el
abuelo, ahora te vas vos… ¿Alguien más se quiere ir?
P: Pero Luz…
L: Basta
Pau, no hablemos del tema. (Se levantó mientras seguía poniendo las ropas en la
valija de su hermana)
P: No te
enojes, pero es así como es, la vida se termina en cuanto vos no te das cuenta
Lu. Hoy estamos vivos, pero mañana nadie puede asegurártelo.
L: ¿Pero que
cosas decís?
P: La verdad
que nadie te dijo. Tené en cuenta que te puedo decir cosas que no te gusten,
¿pero mentiras? No…
L: Sos…
(Dijo enojada)
P: Eso se
llama sinceridad hermanita. Acostúmbrate.
L: Entonces
seguí sola.
P: ¡Pero no
es para que te enojes!
L: ¿Quien te
manda a querer irte al medio del mundo? ¿Eh?
P: Y dale…
Anda Lucecita, anda tranquila.
L: No te vas
a ir, ahora vas a ver que yo tambien soy sincera y lo que digo cumplo. (Dijo
yéndose tras la puerta y un fuerte portazo)
P: Hui, eso
sí que es digno de mamá… Es dura.
Luz bajó
hasta la cocina en donde fue la última vez que vio la computadora de Paulina y
presionando unas cuantas teclas se dijo por sus adentros.
L: Dije que
no te ibas y no te vas.
Presionó
<Cancelar> y en segundos “Aerolíneas Argentinas” le reembolsó el pasaje
cancelándolo. Se sonrió y terminó por ir a su habitación.
~~~
Más tarde,
ya todos despedían a Paulina y Luz no bajó de su habitación. Pau muy entristecida porque su hermana se haya
enojado con ella, subió a verla antes de irse.
P: Hola
(Tocando la puerta) ¿Puedo pasar Lu?
L: Hacé lo
que quieras. (Dijo enojada)
P:
(Ingresando a la habitación) Ehi, no te enojes conmigo, no me quiero ir así
enojada con vos…
L: Lo
hubiera pensado antes. (Dijo seriamente)
P: Por
favor, perdoname, sé que fue un poco duro lo que te dije, pero no es malo que
yo sea sincera con vos. Es bueno.
L: ¿Que tene
de bueno eso que me dijiste?
P: Que nunca
te voy a mentir. Jamás diría algo que no es, y que sos hermosa, es la mayor
verdad que puedo decirte.
(Ella le
sonrió mientras Luz le respondía. Ambas se unieron en un abrazo mientras se
sonreían. Pau se emocionó mientras le confesaba…)
P: Nunca
pensé que iba a extrañarte tanto, nena…
L: Pronto
nos vamos a ver hermanita.
P: Eso
espero hermosa. Te quiero mucho, mucho ¿sí?
L: Si, yo
tambien. Cuidate, nos vemos pronto. (Dijo sonriendo por sus adentros)
P: Nos
vemos.
Saliendo de
la habitación, Paulina bajó hasta la sala.
V: ¿Qué te
dijo?
P: Ya está
todo en orden.
N: Nos vemos
flaquita, te quiero mucho.
P: Yo
tambien te quiero mucho botoncito mío.
N: Jajaja
tráeme muchos regalos eh…
P: Lo
prometo. (Guiñó un ojo)
V: Mamá te
ama mi amor. Te vamos a extrañar mucho. (Dijo muy emocionada mientras volvía a
abrazarla) Me vas a hacer mucha falta.
P: Vos a mi
mami, pero tranquila no va a ser mucho tiempo.
V: Tomate el
tiempo que necesites.
P: Gracias
mami. (Volvieron a apretarse en el abrazo y Marcos se asomó para abrazarla él)
M: ¿Estás
segura que no queres que te lleve papá al aeropuerto?
P: No papi,
no hace falta.
M: Te amo mi
amor, te voy a extrañar princesa de papá.
P: Tambien
te voy a extrañar papi. Nos vemos pronto lo juro.
M: Así
espero hija.
Marcos se
acercó a Victoria y tomándola de los hombros la abrazó, mientras tambien ponía
una mano sobre el hombro de Nathán. Paulina saludó con una mano mientras
Victoria terminó.
V: Te amo mi
amor.
P: Tambien
mucho, mucho a los cuatro. Nos vemos pronto.
Cerró la
puerta en sus espaldas y salió. Matías el chofer, subió las valijas al baúl y
pronto ya estaban partiendo hacia el aeropuerto. Cuando el recuerdo de la fecha
y de su agenda la hizo cambiar de opinión.
P:
¡Almorzaba con Mateo! ¡Mierda! (Tomó su cabeza y se retractó con el chofer) No
Matías, me equivoqué vamos para el centro. A “Principesca”
M: ¿Al
restaurante?
P: Si, si
tenía un almuerzo.
M: ¿Hoy
sábado? ¿Antes de su viaje?
P: Que
curiosidad, si hoy sábado antes de mi viaje ¿que te molesta?
M: Yo no
dije nada señorita, perdonemé.
P: Esta
bien, no te preocupes. (Dijo distraída)
Estaba
llegando a un elegante restaurante de Capital, cuando el muy descuidado de su
chofer, frenó de un tirón porque casi pasa un semáforo en rojo. Muy enojada
Paulina lo miró y le dijo
P: Pero ¿que
te pasa a vos?
M: Perdóneme
señorita, es que estaba distraído…
P: ¿Distraído
irresponsable? Por distraído, vas a tener que buscarte otro trabajo ¿me
escuchas? Idiota…
M: ¿Por qué
no te vas al carajo mujer? Hace más de un año y medio que trabajo llevándote de
acá para allá a vos… (El peor día del Chofer)
P: Sabes que
pedazo de pelotudo. Dejame las valijas en mí departamento, y no, no te voy a
sacar el trabajo porque ya no te voy a tener que ver la cara de idiota que
tenés. Ya casi que llego. Asique, lleva el auto a mi casa… (Él no respondía
nada)
P: Más te
vale no decir nada a mi familia de esto… Yo digo ¿Por qué no pensaste bien lo
que querías hacer de tu vida? No es mi culpa que no te guste tu trabajo
entendes? Mira que no trabajas gratis ¿ok? ¡Tómatelas! (Bajándose del auto pegó
un fuerte portazo y acercándose a la ventanilla le dice) Y más te vale que este
auto llegue sano y salvo a mi casa…
(Sin decir
más, se fue muy por su camino. Ya bastante nerviosa, trató de calmar esos
nervios sentándose en una mesa y luego unos veinte minutos pasados al horario
fijado para verse con Mateo, lo llama)
*Llamado Telefónico*
M: Hola?
P: Mateo te
estoy esperando ¿en donde estas?
M: Nooo, mi
amor, Pauli, perdoname…
P: Otra vez
Mateo, Por favor decime que es por trabajo…
M: Mmmmno,
no mi amor es por ella, es María me tiene aprisionado en mi casa, es que Anita
esta con fiebre y ella tan exagerada habló con mi secretaria cancelo todo lo
que tenía para hoy, me dejó sin escusas, perdoname Pauli…
(Al
escucharlo decir que la volvía plantar en el mismo lugar la destrozó
completamente, ya era la tercera vez seguida, con muchas más anteriormente. Muy
dolida una lágrima retuvo mientras frenando sus escusas ya insoportables le
dijo)
P: No, no me
tenés cansada vos y tu mujer que te pensas que yo tengo que vivir al compás de
tus problemas? Mira vamos más de un año así Mateo… (Ya llorando destrozada) ¿A
vos te parece que yo tengo que vivir así? ¿Yo me lo merezco? No doy más…
M: Pará,
Pauli mi amor yo te juro que…
P: No me
jures nada! Escúchame una cosita, no te quiero volver a ver más en mi vida, ¿me
escuchas? ¡NUNCA MAS! (Finalmente le cortó, para no tener que volver a escuchar
su voz otra vez. Muy desorientada lo miró al mozo que le preguntó si sentía
bien y ella solo se levantó dejando plata sin haber pedido nada y salió del
lugar. Muy cansada miraba hacía todos lados, estaba como shockeada, una vez más
había dejado a un lado al hombre que amaba por culpa de segundos. Retomando la
conciencia miró hacia la calle y le hizo seña de parada un taxi que se
aproximaba a ella. Al tener en frente suyo el vehículo, se subió y
automáticamente nuevas lágrimas negras rodaron por sus mejillas. Un hombre
joven, muy apuesto, pero sencillo con grandes ojos color azules la miraron por
el espejo retrovisor, entonces muy apenado paró el taxi a un costado y
acercando un pañuelo le preguntó)
T (Taxista,
aún no dijo el nombre): Porque llora hermosa? Alguien la lastimó?
CONTINUARÁ...